La iglesia parroquial de Santa María dei Confini, más conocida como Pieve Confini, es un territorio que debe su nombre a su posición en la frontera (en italiano, confine) entre las zonas de Perugia y Cortona, durante la Edad Media fue de hecho la frontera entre la diócesis de Perugia y Arezzo.
La iglesia de Santa Maria dei Confini, situada a 274 metros, es la estructura que representa el modelo más importante de arquitectura románica en la zona del lago Trasimeno.
Su primera atestación en documentos escritos se remonta al año 1037, y la segunda vez ha sido mencionada en un documento de Federico Barbarossa que data del 13 de noviembre de 1163. Por este motivo se supone que su construcción se remonta al periodo comprendido entre los siglos XI y XII.
Antiguamente la iglesia parroquial tenía una estructura muy elegante, constaba de tres naves, numerosos arcos apuntados que enriquecían y dividían las naves, ábsides de medio punto y el presbiterio estaba en posición elevada para facilitar el acceso a la cripta. En los siglos siguientes, sin embargo, la iglesia fue completamente derribada porque se reconstruyó la fachada, la nave se hizo única, uno de los ábsides fue derrumbado y junto a la iglesia se construyeron algunos caseríos.
Desde el exterior se puede ver el ábside, la única parte bien conservada y algunas decoraciones que dominaban el portal.
Actualmente la iglesia parroquial Pieve Confini, que se encuentra dentro de una propiedad privada, no está bien conservado y es peligroso y en un estado de abandono, debido al peligro real de colapso de la estructura, la zona fue de hecho delimitada para garantizar la seguridad.